Sinfónico 24

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Sinopsis

Pocas obras han soportado mejor que la Novena de Mahler la carga de significados que la posteridad ha proyectado sobre ellas. Concebida probablemente como un réquiem, eco de su exilio forzado y de la enfermedad que minaba su salud irreparablemente, la sinfonía ha sido leída como una visión profética del colapso de una era, de la propia Viena. La sugestión de su música es tal que todo lo escrito sobre ella —por exagerado que parezca— termina por sonar cierto.

Estrenada en Viena en 1912 —un año después de la muerte de su autor— por su amigo Bruno Walter, la obra merece con creces la etiqueta de testamentaria. Sus primeros movimientos despliegan una densidad tan extrema que, por momentos, parece como si Mahler hubiera llevado su lenguaje al límite de lo inteligible. Pero es el Adagio final el que, por su semejanza estructural con la Patética de Chaikovski, revela el verdadero sentido de la sinfonía: una disolución beatífica, un gesto de conciliación que se extingue en el silencio.

Intérpretes

Repertorio

Autor Pieza
Gustav Mahler
Sinfonía núm. 9 en Re mayor [80’]

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